Ante el pedido de renuncia que diversos sectores de la ciudadanía, medios de comunicación, Congreso de la República, entre otros, han dirigido al presidente Pedro Castillo, el primer mandatario rechazó dar un paso al costado y manifestó su intención de mantenerse en el poder hasta el 28 de julio de 2026.

La crisis generada por la caída de su tercer gabinete a solo días de haber juramentado parece ser insostenible. En poco más de seis meses de gestión Castillo deberá elegir a su cuarto premier, el cual tendrá un mes para ir al Congreso a pedir el voto de confianza.

Sobre la existencia de un gabinete en la sombra señalado por exfuncionarios como Mirtha Vásquez, Avelino Guillén y Carlos Jaico, se lee lo siguiente en el comunicado difundido en Twitter: “rechazo rotundamente ciertas teorías sobre la injerencia de mi equipo de confianza en la toma de decisiones. Desde el inicio de mi gestión he sido respetuoso de las decisiones de los ministros de Estado”.

Asimismo, el presidente recurrió a la victimización, denunciando la existencia de una campaña mediática de sectores que promueven la vacancia con actitudes antidemocráticas para desestabilizar al país poniendo en riesgo la gobernabilidad.