Ante la presión de los sucesivos escándalos y visos de corrupción en el Ejecutivo, el presidente Pedro Castillo accedió a que la Comisión de Fiscalización del Congreso de la República tome sus declaraciones en Palacio de Gobierno.

Así lo confirmó el presidente de la referida comisión, el congresista de Fuerza Popular Héctor Ventura, quien lidera las indagaciones del caso de la vivienda de Sarratea, en el distrito de Breña, que habría funcionado como despacho presidencial clandestino y donde habría operado una presunta mafia enquistada en el Ministerio de Transportes y Comunicaciones.

Otro de los funcionarios públicos que tendrá que dar sus declaraciones es el presidente de Petroperú, Hugo Chávez, quien no ha acudido a las citas previas del Legislativo.

Otro suceso importante ha sido el levantamiento del secreto bancario, tributario y de las comunicaciones de Segundo Sánchez Sánchez (dueño de la casa del jirón Sarratea) y de Silvia Barrera, así como el de Víctor Valdivia y Édgar Vargas, ambos miembros de la comisión de Provías que favorecieron al consorcio vinculado a Karelim López.