Según Daniel Velandia, representante de Credicorp Capital, la inversión privada en el Perú caería un 7 % el siguiente año. Esta proyección difiere de la señalada por el Banco Central de Reserva, que indicó que la misma no caería ni crecería, quedando en un 0 %.

El principal motivo por el cual se daría esta caída es la incertidumbre política a raíz del cambio de Gobierno, factor cuyo progreso es el que determina la diferencia entre los porcentajes estimados.

Mientras que, para el BCR, el ruido político empezaría a disminuir a partir de este mismo 2021, para Credicorp la incertidumbre se mantendrá con fuerza hasta inicios de 2022, ya que es incierto si se convocará a una Asamblea Constituyente, si se establecerán nuevos impuestos, o si se definirán nuevas políticas que afecten la inversión.

El discurso de Pedro Castillo de una estabilidad jurídica en el Perú difiere de las acciones de la bancada de Perú Libre y de los comentarios de ministros como Dina Boluarte, quienes pretenden un inminente cambio de Constitución, por eso diversos analistas señalan que debería haber un deslinde para solidificar la opción peruana como destino de nuevas inversiones.