El Gobierno se ha limitado a enviar a la minera Las Bambas las demandas de las comunidades en conflicto y espera pacientemente una respuesta, cuando está por llegar un inminente cese de operaciones por los bloqueos de carretera de más de 25 días.

El último intento de diálogo entre las partes fracasó. El Ejecutivo intentó llegar a una solución, pero la reunión programada para el día martes, que iba a analizar la última propuesta de la empresa no se concretó.

Baltazar Lantarón, gobernador regional de Apurímac, también se pronunció sobre el accionar del Gobierno. La calificó de pusilánime y pronosticó que el hecho generaría una inestabilidad que retrasaría las inversiones.

Y es que los aportes de la minera Las Bambas representan tres cuartos de toda la economía de Apurímac, que en dinero se traduce en 4 mil 900 millones de soles por concepto de impuestos. Asimismo, habría que destacar que no se han ejecutado más de 40 millones de dólares en la región, los cuales ya estaban presupuestados para este año.