Una Asamblea Constituyente podría ser un gran derroche de dinero además de abrir las puertas de graves peligros para los derechos de todos los ciudadanos.

Y es que, a pesar de que continúa siendo una idea poco clara, podría convertirse en un congreso paralelo al que tenemos ahora, que con una cantidad de miembros de 130 demandaría el pago de 40 millones de soles solo en sueldos por todo un año.

Además de esto, se tendría que pagar los sueldos del personal de cada asambleísta y toda la logística necesaria, como los locales en los que se trabajaría, pasajes aéreos para las labores de campo, gestión burocrática y operativa, entre otros.

Según declaraciones de Martín Cabrera (experto en temas parlamentarios) para El Comercio, si el actual Congreso cuesta un aproximado de 880 millones de soles, una Asamblea Constituyente gastaría más de la mitad, unos 450 millones de soles.