Opinión

Una criollada muy costosa; por Carlos E. Gálvez Pinillos

Publicado el 10 de abril de 2025

Por Carlos E. Gálvez Pinillos, publicado en Expreso


En febrero de 2023, publiqué un artículo en el que hacía notar que, en el Perú, si se trata de Petroperú, podemos hacer “tabula rasa” de las normas que se nos ocurra. En esa oportunidad, se promulgó el DS 003-2023-EM, mediante el cual se autorizaba que “los titulares a cargo de las instalaciones de refinación o de procesamiento de hidrocarburos que, a esa fecha, se encuentren en proceso de puesta en marcha, podrían operarlas hasta por un plazo de dieciocho (18) meses… mientras obtengan los títulos habilitantes, aprobación de informes, opiniones, obtención de registros, certificados y otros permisos necesarios para el uso de tales instalaciones”. Y BINGO ¿Quién tenía el cartón ganador? ¡PETROPERU!


Ya en ese entonces, señalé que esto, no sólo era una ilegalidad, por ser una norma con nombre propio, sino que, además, era una tremenda irresponsabilidad, pues se autorizaba el inicio de operaciones de la nueva refinería de Talara para diciembre 2023, sin contar con las inspecciones y autorizaciones de OSINERGMIN, ni con los títulos habilitantes para operar.


Por supuesto que se indicaba, que debían tener un Plan de Atención de Respuesta a Emergencias de “cumplimiento obligatorio”, remitido a la Dirección General de Hidrocarburos y al OSINERGMIN, además de contar con pólizas de seguros.


La pregunta es ¿quién en su sano juicio iba a asegurar un activo de más de US$ 5.5 mil millones en esas condiciones? Para nadie es un secreto, que la refinería de Talara es una planta compleja, especialmente, porque se exigió que cuente con una unidad de “flexicoking”, para poder refinar petróleo pesado. Esa sola unidad tiene un costo del orden de US$ 1 mil millones.


Pues bien, esa unidad está fuera de operación desde diciembre de 2024, por haberla operado inadecuadamente. No sólo eso, sino que Exxon Mobil, empresa propietaria de la tecnología y quién otorga la licencia de su uso a Petroperú, hoy les hace ver que han introducido una modificación no autorizada (bypass) en la unidad flexicoking y que, por lo tanto, no garantizarían los resultados de la operación. No asumen los efectos de la modificación realizada y resaltan, que la operación que han efectuado es extremadamente peligrosa. Además, esto pone en serio riesgo la garantía del fabricante sobre esta unidad.


Dicho esto, ¿qué compañía de seguros en el mundo será capaz de asegurar el daño propio de la refinería, su lucro cesante y los riesgos aliados a un desenlace fatal de nuestra inversión en estas condiciones?


Aquí hay grave responsabilidad por negligencia de la gerencia y el directorio de Petroperú, quienes optaron, sin la anuencia del fabricante y propietario de la licencia, por hacer modificaciones inconsultas. Según carta de Exxon Mobil a Alejandro Narváez, presidente de Petroperú, operar bajo las condiciones indicadas de falta de apoyo técnico y expansión térmica, es altamente peligroso y puede traer como consecuencia derrame de hidrocarburos a muy altas temperaturas, que pueden provocar incidentes y accidentes.


Ciertamente, rechazan avalar los cambios no incluidos en las “Especificaciones Básicas de Diseño” y recomiendan seriamente, detener la operación y efectuar las reparaciones adecuadas, que pueden tomar más de seis meses.


¿Cómo se atreven a modificar un activo tan costoso, sin anuencia del fabricante? ¿Quién asumirá las consecuencias por los daños? ¿Por qué nos mienten? ¿Dónde está la Contraloría?


¡Esto es una criollada!

 

 

 

 

 

Fuente: CanalB

Noticias relacionadas

Escribe un comentarios
Últimas publicaciones