Fuente: EL REPORTE

La Fiscalía viene siendo asediada desde que amplificó su investigación contra la presunta red de corrupción en el Ejecutivo. Las dos víctimas de este reglaje aún en proceso de corroboración fueron la fiscal de la Nación, Liz Patricia Benavides, y ahora último, Marita Barreto, quien está a cargo del Equipo Especial de Fiscales contra la Corrupción (EFICCOP). La modalidad que más se habría repetido es la de penetrar la privacidad de las mencionadas usando un dron. Los dos últimos meses, julio y agosto, ambas captaron cómo estos aparatos registraban imágenes de sus domicilios. Pese a ser personas de alto rango, fueron vulneradas por, hasta el momento, personal desconocido. Su situación se agravó conforme fueron adentrándose más a esa zona oculta del entorno castillista.

Este último domingo 21 de agosto, el representante del Ministerio Público, Jorge García Juarez, hizo eco de la denuncia de la fiscal Marita Barreto. Apenas se postergó la audiencia de prisión preventiva por 36 meses contra Yenifer Paredes y José Nenil Medina, el abogado dijo que a las 5:24 de la tarde un dron había invadido el hogar de la magistrada. Ella, agregó, intentó grabar, pero el aparato salió raudo del perímetro.

“Por lo tanto, ha formulado una denuncia en la comisaría correspondiente al sector de su domicilio dejando constancia de este suceso desafortunado, coincidente, en medio de una discusión de prisión preventiva donde se va a discutir el peligro de obstaculización por parte de una organización criminal enquistada en las más altas esferas del poder”, apuntó García Juárez.

En la denuncia, que dejó en la sede policial, la fiscal consignó que el aparato "se encontraba grabando el interior del domicilio merodeando varias veces por el interior y alrededor de la casa”. Asimismo, mencionó que salió con sus familiares para ubicar al que estaba operando la máquina, pero no encontraron a nadie.

La noche del mismo domingo, la fiscal Liz Patricia Benavides expresó su respaldo y su preocupación por lo sucedido con su colega. “Están invadiendo espacios privados, donde se está afectando la privacidad y la seguridad no solamente mía, sino también de la Dra. Barrera”, apuntó. Incluso recordó que ella también viene siendo afectada por esta intrusiva forma de rastrear sus movimientos. “Los investigados tratan de atacar a las personas que los investigan. En este caso, primero he sido yo: el tema del dron, toma de fotografías, tema de seguimientos, ataques orquestados con informaciones falsas. Ahora vemos al equipo especial a cargo de la doctora Barreto donde vemos el tema del dron”, indicó.

La fiscal de la Nación, respecto a su caso, hizo alusión al 13 de julio cuando halló un dron sobrevolando su domicilio en San Borja. Este hecho pudo ser confirmado por el personal de la División de Protección de Dignatarios (DIVPRODIG) de la Policía Nacional. El suboficial que fue asignado a la investigación divisó "a la altura del cuartel del ejército 'El Pentagonito' que un dron de color blanco se encontraba sobrevolando por el lapso de 3 minutos".

Liz Patricia Benavides también hizo referencia a la toma de fotos que se le viene realizando clandestinamente a sus hijos. Y para sellar recordó el intento de Beder Camacho de querer desacreditarla dando información falsa. Había tratado de asignar una tesis falsa a la magistrada.

En medio de la confrontación entre la Fiscalía y el Ejecutivo, este reglaje es sospechoso, por decir lo menos.

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