El presidente de la República, José Jerí, encabezó la inauguración de la nueva planta de ensamblaje de vehículos especiales de la Fábrica de Armas y Municiones del Ejército (FAME), ubicada en Lurigancho-Chosica. La instalación permitirá que el Perú produzca sus propias unidades para uso policial, sanitario y de seguridad ciudadana, reduciendo la dependencia de importaciones.

Durante su visita, el mandatario recorrió los talleres donde se ensamblarán los vehículos y supervisó los primeros modelos fabricados, entre ellos un vehículo militar táctico, una camioneta de serenazgo con equipamiento de protección reforzado y una ambulancia preparada para operar en zonas rurales o de difícil acceso. El objetivo, señaló, es dotar a las instituciones públicas de unidades diseñadas según las necesidades del territorio nacional.

El proyecto forma parte de la estrategia del Ejecutivo para que el país deje de adquirir automóviles en el extranjero y avance hacia una producción propia con apoyo tecnológico de Corea del Sur. En ese marco, se implementará un proceso de transferencia de conocimiento, homologación técnica y asistencia integral para la construcción de vehículos tácticos y de uso militar, fortaleciendo la capacidad industrial del Estado.

La empresa surcoreana STX Corporation será el socio estratégico principal en la iniciativa, aportando capital, tecnología y asesoría operativa. Su participación busca garantizar estándares internacionales en la fabricación y ensamblaje, así como la sostenibilidad financiera del proyecto.

La puesta en marcha de la planta representa uno de los ejes del Plan Nacional de Fortalecimiento de la Industria de Defensa, impulsado por el Ministerio de Defensa. En la ceremonia también participaron los ministros del Interior, Vicente Tiburcio; de Defensa, César Díaz; y de Transportes y Comunicaciones, Aldo Prieto, junto al comandante general del Ejército, César Briceño.