Este domingo, la ultraderecha francesa encabezada por el partido Agrupación Nacional (RN) de Marine Le Pen y sus aliados, logró un contundente 34% de los votos en la primera vuelta de las elecciones legislativas anticipadas. Esta victoria coloca a las fuerzas de centroderecha del presidente Emmanuel Macron en tercer lugar, detrás de la coalición de izquierdas Nuevo Frente Popular (NFP), según las primeras estimaciones.

El RN, que deberá esperar a la segunda vuelta el 7 de julio para confirmar si alcanza la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional, celebró su triunfo en Hénin-Beaumont. "Necesitamos una mayoría absoluta", declaró Le Pen ante sus seguidores, destacando la casi desaparición del "bloque macronista".

Las estimaciones de los institutos de sondeos Ifop e Ipsos sitúan a la alianza de Macron con un 20,5% a 21,5% de los votos, por detrás del NFP que obtuvo entre un 28,5% y un 29,1%. Esta elección marca un momento histórico en Francia, ya que podría llevar a la ultraderecha al poder por primera vez desde la Liberación de Francia de la ocupación nazi en 1945, sumándose a países de la UE como Italia.

En respuesta a estos resultados, el presidente Macron ha llamado a una "unión amplia claramente democrática y republicana" para la segunda vuelta, buscando frenar el avance de la ultraderecha. "Frente a la Agrupación Nacional, es hora de una amplia unión claramente democrática y republicana", afirmó Macron en una declaración enviada a la agencia AFP tras conocerse la victoria del RN en la primera vuelta.