Alejandro Toledo descendió del avión enmarrocado y ya está en manos del sistema judicial peruano que lo esperó seis años. Fueron casi 12 horas de antesala los que pasaron hasta llegar a su encierro en el penal de Barbadillo.
A las 7 de la mañana del domingo el avión que lo trajo extraditado desde Estados Unidos arribó al Jorge Chávez, y desde las 7 de la noche cumple las primeras horas de sus 18 meses de prisión preventiva, acusado de recibir 35 millones de dólares de la empresa Odebrecht, a cambio de concederle la construcción de la carretera Interoceánica Sur.
Una escolta de agentes federales estadounidenses entregó al exmandatario a la justicia peruana para ser procesado. La fiscal de la Nación, Patricia Benavides, supervisó la extradición y explicó a Toledo sus derechos.
Fue trasladado en helicóptero al cuartel Los Cibeles, y de allí siguió su recorrido a la Corte Superior Nacional de Justicia Penal Especializada, donde le realizaron el control de identidad. Su abogado, Roberto Lu, denunció que su defendido no probó alimentos en la mañana ni en la tarde y calificó de maltrato el haberlo tenido más de tres horas en la sede judicial.
En el transcurso de la tarde, el INPE informó que, en base de la orden de internamiento emitida por el Quinto Juzgado de Investigación Preparatoria Nacional, se dispuso que Toledo sea recluido en el penal de Barbadillo.
Fuente: CanalB
Destruida la autoridad, liquidada…
El hueco financiero de la petrolera…
El director de la CIA, John Ratcliffe,…
Alfredo Flores, comunicador y…
Durante una reciente emisión…